De los autores de «El mayor programa de obra pública de Luján», llegó a la cartelera de la política local: «Una nueva etapa de pujanza, desarrollo y crecimiento». Ladran Sancho recorre las líneas aventuradas de Oscar Luciani. Obra pública, desarrollo urbano, salud, políticas sociales, producción, turismo y transparencia en la licuadora discursiva de Cambiemos.
En ausencia del intendente fue Fernando Casset, el presidente del Concejo Deliberante, quien puso la cara. Explicó a los convidados de piedra el faltazo de Luciani y envió el discurso de apertura de sesiones ordinarias a concejales y medios de comunicación.
La obra pública como motor de la economía local
Ante la inexistente reactivación económica, el caballito de batalla de Cambiemos en los municipios es la obra pública. Sobre el tema, el jefe comunal detalló las obras realizadas durante el 2017 calificadas por él mismo como las “más grandes de toda la historia de Luján”. Entre las obras más importantes concretadas resaltan las Avenidas Bestchedt, Cabred, y Julio A. Roca, y los desagües pluviales en diferentes barrios de Luján.
Este año sin elecciones no trae mega anuncios como el anterior. Más bien, el ejecutivo se compromete a terminar obras prometidas para el año pasado que no fueron inauguradas por demoras o en algunos casos porque ni siquiera se iniciaron.
Algunas de ellas son la semi peatonalización de la Calle San Martín, la terminación de las 202 viviendas en el Barrio Santa Marta y las 40 casas en la localidad de Olivera. Éstas últimas, motorizadas por vecinos y organizaciones.
A las obras inconclusas se suman promesas: la pavimentación de 14 cuadras y la construcción de dos plazas en el Barrio Ameghino y una planta depuradora para el consorcio urbanístico del Barrio Santa Marta.
Estas últimas obras, a diferencia de las del año pasado que fueron destinadas a los sectores más pudientes, se retrasaron y continúan con la promesa de ser finalizadas durante este año.
Mi nueva amiga: la especulación inmobiliaria

En los últimos años el Luciani vecinalista dió paso a Oscar; un nuevo intendente PRO. En sus discursos hay líneas de continuidad como la insistencia en mantener una administración austera, modernizar el Estado local y garantizar prestaciones básicas.
Pero también existen puntos de ruptura, como la centralidad en la obra pública y su apoyo explícito a los desarrolladores inmobiliarios. Con estas novedades Oscar se acomoda a las necesidades de la etapa amarilla.
En el discurso de apertura de sesiones del año 2017 se mostró esperanzado en que el Código de Ordenamiento Urbano, diseñado al servicio del sector inmobiliario trajera mejoras al distrito. Esta vez apuesta a más, elogiando los proyectos que necesitan modificaciones de la ordenanza que regula el uso del suelo que aún no está aprobada por los organismos provinciales.
En ese sentido el jefe comunal expresó en el texto de este 2018 que: «No sólo la inversión pública contribuye a mejorar la fisonomía urbanística. También los emprendimientos, desarrollos e inversiones privadas (como barrios cerrados, clubes de campo, countries, a la par de urbanizaciones abiertas) generarán una expansión geográfica de las áreas residenciales, ya que -con servicios adecuados- se evalúa que existirá una multiplicación de las unidades de vivienda a través de edificaciones en altura en áreas urbanas».
Desde estas páginas, “tan subjetivas” para algunos avezados y críticos lectores, se explicó que “en general, los Estados municipales ponen al servicio de los intereses del mercado inmobiliario la infraestructura, la obra pública, los servicios y la legislación necesaria” en desmedro del acceso a la vivienda y la tierra de las mayorías.
El discurso del intendente ejemplifica lo dicho cuando afirma que “la administración municipal ha generado una modalidad de trámite administrativo que posibilita a los emprendedores adelantar el estudio de sus respectivos proyectos por parte de las áreas técnicas del Municipio, antes de la vigencia del nuevo Código de Ordenamiento Urbano» esto contrasta con la casi nula existencia de políticas públicas para el resto de la población que no accede a ese tipo de emprendimientos privados.
Este proceso muestra la poca firmeza en la planificación de la política urbanística. La especulación inmobiliaria fue y es la única lógica de mercado que rigió en los precios de los lotes y los alquileres.
Herramientas que el intendente podría utilizar para paliar la situación son el Banco de tierras aprobado por el HCD, el impulso de una inmobiliaria municipal, la identificación de macizos abandonados o promover planes de viviendas. Sin embargo nada de eso hay en las líneas que el intendente envió a concejales y medios. Aunque augura que «estamos transitando, y se viene inexorablemente, una nueva etapa para Luján, de pujanza, desarrollo y crecimiento, que el Estado Municipal ha de acompañar decididamente, no como espectador sino como protagonista”.
Si hay crisis que no se note
En una suerte de realidad paralela el intendente destaca la labor de su gestión en Parque Industriales y Polos Tecnológicos sin mención alguna a la crisis del sector textil que cuenta decenas de despedidos y suspendidos, y centenares de trabajadores a los que se les disminuyó notablemente el ingreso con reducción de turnos y horas extras.
La misma miopía aparece en materia de salud y políticas sociales. En el Hospital de Luján se atiende el 50% de la población local. De antemano Luciani juega la primera carta en el juego de las excusas advirtiendo que: “La comuna sufrirá una sensible disminución de los ingresos recibidos este año por coparticipación en salud, que se verán reducidos en el orden de los $ 39 millones”.
Sin más datos concretos, el discurso promete lo que cuesta creer a la luz de los últimos años: «se ha trabajado, y se continuará haciéndolo, en consolidar los servicios de guardia, completando la nómina de profesionales médicos en pediatría, guardia Adultos y UTI, dotándolas de equipamiento adecuado para sus cometidos y elevando la calidad profesional de los mismos”.

Nuevamente la realidad contrasta el discurso porque si los trabajadores de rayos no hubieran tomado la dirección del nosocomio sus guardias extras hubieran sido pagadas con menor valor debido al ajuste en la cantidad de servicios prestados. Así resulta difícil imaginar un futuro de prosperidad y mejores condiciones.
En Políticas Sociales, hincha el pecho el intendente enumerando supuestos logros: la construcción de la sede de Defensa Civil, aunque el presupuesto de este año casi no le asigne recursos; la construcción de la etapa final de la Casa de Abrigo y un “intenso despliegue de acciones” que se impulsan desde la Secretaría. Pero al mirar con atención el área arrastra un déficit importante con sus precarizados y según las denuncias, también perseguidos trabajadores; tanto en el Servicio Local como en la Casa de Abrigo.
En turismo las promesas sobran
El plan turístico que el ejecutivo impulsará este año está casi terminado. Sin embargo, poco desarrollo tuvo en el no discurso del intendente.
Apenas adelantó que enviará el Pliego de Bases y Condiciones para licitar la concesión de la Estación Terminal de Ómnibus y de obras complementarias. Aunque si no fuera por la vocación de ocultar podría enumerar que la reforma de la terminal se orienta a la construcción de una playa privada de estacionamiento para lo cual ya se contrató a ya contrató por 300 mil pesos a una arquitecta para para desarrollar el anteproyecto de la obra.
En el año en que Luciani apuntará fuertemente a desarrollar una política de turismo, el tema es una incógnita para la oposición y los vecinos de Luján.
Tan transparente que ni se ve

Engalana el discurso de apertura de sesiones una apología a la transparencia que se contradice con el insistente pataleo de la oposición y los medios de comunicación que solicitan acceder a información pública que está virtualmente blindada por la gestión municipal.
En un punteo incompleto y alejado de la realidad, el intendente habló de facilitar «el acceso a la información referida a la administración municipal y asegurar la transparencia de la gestión», con un cinismo a toda prueba.
Su gestión recibe pedidos de información de todo tipo y como respuesta da solo silencio cuando no esconde deliberadamente los datos, publicando a cuenta gotas estadísticas sueltas.
No hay posibilidad de se ver expedientes sensibles, el Boletín Oficial no se actualiza en tiempo y forma y cuando se actualiza solo se lo hace en forma selectiva.
Gobierno Abierto, una plataforma anunciada con bombos y platillos, con un área creada a tal fin y con funcionarios contratados especialmente, no muestra avances y para colmo oculta información de manera sistemática; pero según Luciani pasa otra cosa.
Para muestra, bastan un par de botones, puede cualquier lector tratar de indagar en alguno de los casos que implican jugosos negocios: empresas que trabajan en basural, desarrollos urbanísticos y emprendimientos millonarios como el de la termoeléctrica ilegal.
Repitiendo, como el día de la marmota
Un año más, de promesas renovadas y una apuesta firme en poner el estado municipal y los recursos de vecinos y vecinas contribuyentes al servicio de grandes inversores.
Por otra parte, los temas más destacados de los últimos meses no aparecieron entre las líneas de Luciani: paritarias, termoeléctrica, la reconversión del basural, entre otros; fueron problemáticas ausentes en el discurso escrito.
De todas formas las sesiones ordinarias en el Concejo Deliberante quedaron inauguradas y el ejecutivo seguirá su camino volcando allí una larga lista de expedientes que pretende aprobar. Habrá que ver como es, el reino del revés.